A medida que cambia el panorama de los negocios, también lo hacen las estrategias de marketing disponibles para las empresas. Dos de las decisiones más importantes que debe tomar una empresa cuando se trata de marketing son si establecer una tienda física o un sitio web de comercio electrónico o ambas. Cada una tiene sus propios pros y contras, que deben considerarse detenidamente antes de tomar una decisión. Echemos un vistazo a ambas opciones con más detalle.
Los pros y los contras de un sitio web de comercio electrónico
Un sitio web de comercio electrónico es una forma estupenda de que las empresas lleguen a clientes de todo el mundo, así como a aquellos que quizá no tengan acceso a la ubicación de una tienda física. Elimina las fronteras geográficas y facilita que los clientes encuentren los productos que desean sin tener que salir de casa. Disponen también de una gran variedad de métodos de pago, gracias a las soluciones de pago de terceros. Además, crear un sitio web de comercio electrónico es mucho menos costoso que abrir una tienda física. Sin embargo, esta opción también tiene algunas desventajas, como el hecho de que los clientes no pueden interactuar con sus productos en persona antes de tomar una decisión de compra y puede perder ventas potenciales de clientes que prefieren comprar en persona. Tampoco tienen el consejo del vendedor con relación directa, cuando sabemos que un buen dependiente es capaz de orientar y cerrar una venta que sin asesoramiento se perdería. Para tener el tráfico necesario para vender tus productos, necesitas servicios de marketing digital y conocer las tendencias en ecommerce para 2023.
Los pros y los contras de una tienda física
Una tienda física ofrece numerosas ventajas, como la posibilidad de que los clientes interactúen directamente con su producto o servicio antes de comprarlo y la excelente oportunidad de obtener ventas adicionales a través de las técnicas de venta cruzada utilizadas por el personal de ventas. Además, establecer una presencia física puede ayudar a aumentar la visibilidad de la marca y a fidelizar a los clientes. Por otro lado, gestionar una tienda física requiere grandes costes iniciales como el alquiler, los servicios públicos, las primas de seguros, etc., así como costes continuos como los salarios de los empleados y las tasas de reposición de inventario. Además, puede resultar difícil llegar a clientes potenciales fuera de su área inmediata o de su país si sólo dispone de una ubicación física.
Otra opción es tener una tienda física y construir una tienda online a partir de ella. Los avances tecnológicos han hecho posible llevar una tienda física al mundo digital. Digitalizar una tienda no es una tarea sencilla, sin embargo, son muchos los beneficios que conlleva este proceso de modernización. Los clientes no sólo se benefician de tener una mayor selección disponible en línea, sino que las empresas pueden aprovechar la mejora de los canales de comercialización y racionalizar sus operaciones. Esto puede contribuir a aumentar la satisfacción del cliente gracias a unos plazos de entrega más rápidos y a un mejor control de la calidad. Además, las empresas también podrían reducir sus costes al no tener que destinar tanto a gastos generales de mantenimiento o personal. Al dar el paso hacia la digitalización, las empresas pueden disfrutar de mayores ventas y beneficios y seguir siendo competitivas frente a sus competidores locales y mundiales.
A la hora de decidir entre un sitio web de comercio electrónico o un local físico para comercializar tu producto o servicio, considera detenidamente todos los pros y los contras asociados a cada opción antes de tomar una decisión. Con una planificación cuidadosa y la consideración de todos los resultados potenciales asociados a cualquiera de las dos opciones, ¡podrás tomar una decisión informada que beneficiará a tu negocio a largo plazo!
